Sin duda un lugar para celebrar en grupos grandes y familia, con rica comida y buena vista. El servicio aunque un poco lento es eficiente y amable. A pesar de utilizar ingredientes de buena calidad, muchas veces los platos a la carta no están acordes con las espectativas. El menú es pequeño, pero lo interesante son los bufetes y brunches los cuales muchas veces son temáticos y sorprenden por su variedad, sabor y calidad. .