La comida es muy buena, es lo más parecido a autentica comida coreana en Panamá. Y sirven en muy buena cantidad!!! El ambiente es pequeño, no es un restaurante "lujoso" pero definitivamente es cómodo a pesar de su espacio. La atención es buena, sobretodo porque tienen esos botoncitos para llamar al mesero. Fue una muy buena experiencia y volvería mil veces más.