Tenía años de no comer en el Sorrento. La comida sigue manteniendo los mismos estándares. En esta ocasión pedimos una pizza de jamón y hongos, una pizza marinara con ingredientes adicionales de queso y hongos, un spaghetti pomodoro y una. corvins al ajillo. Las pizzas muy bien logradas y con ese toque del horneada a fuego de leño. La atención estuvo un poco lenta pero quizás se debio a que el restaurante estaba lleno. Tiene un amplio lote para estacionamientos cruzando la calle.