Me encantó el ambiente y el servicio es muy amable y eficiente. Pedí uno de los desayunos que viene con pancakes, huevo y tocino. Los pancakes estaban deliciosos y esponjosos. Mi esposa pidió la omelette vegetariana y estaba muy rica. El jugo de naranja natural es muy bueno. La malteada de óreo le gustó a mis hijos, pero estaba demasiado dulce para mi gusto. Ahora tengo que regresar a probar los otros platos que en las fotos se veían buenísimos.