No es nada fuera de lo común. Sin embargo, siempre me gusta probar cosas diferentes, por lo que pienso que los meseros deberían conocer mejor el menú con el que trabajan. Me gusta más como para ir por la tarde y tener un narguile, que ir en la noche, ya que se pone un poco ruidoso con la música y los bailes y no puedes ni escuchar a quien se tiene al lado y los meseros están muy ocupados.