Este es un punto de encuentro de un sector de la comunidad española. Su estilo es de un bar de barrio de cualquier pueblo de la madre patria. La comida, en general, es buena, y con sabores muy autóctonos, como los encuentras en los pucheros y cocidos. Sin embargo, en ocasiones te puedes encontrar con platillos malogrados. El servicio es regular y la decoración se empieza a avejentar. Para los amantes del fútbol, el mejor momento para ir es cuando se presenta un buen partido, ocasión en que el lugar se torna muy ruidoso.